Celebrado del 18 al 26 de marzo de 2021
Desde la dirección del congreso del Instituto Feminista queremos despedir lo que ha sido el XXV congreso internacional de nuestro instituto. Ha sido un congreso intenso: 140 personas inscritas, y 40ponencias presentadas a través de vídeos y textos cortos. Ello ha posibilitado que a lo largo de estos días los debates sobre la situación actual internacional de los feminismos hayan cogido fuerza. La asistencia internacional, principalmente de España y de países de Latinoamérica, ha permitido diálogos muy enriquecedores sobre temáticas complejas y con posturas que estamos viviendo, principalmente en España, como contrapuestas y con posicionamientos de confrontación. En el Aula Virtual del congreso, con un formato amable donde poder hablar con respeto y con el sosiego que permite la forma no síncrona, hemos establecido debates sosegados, con escucha y con argumentos. Ello nos ha alejado de las posiciones emocionales que a veces se defienden con prejuicios y no con razones.Estos diálogos y encuentros, mantenidos con la intención de comprender y no de “ganar” la batalla dialéctica,creo que han sido uno de los mejores resultados del congreso. Aparte de las conferencias invitadas hemos tenido ocho bloques temáticos, en los que se han agrupado las ponencias en diferentes temáticas, desde la maternidad, sexualidades, violencias, cuidados, activismos, debates teóricos del feminismo, pedagogías feministas y miradas feministas (arte y comunicación), hemos recorrido los principales retos que hoy en día tiene la agenda feminista. Hemos aprendido de las resistencias necesarias que los feminismos tenemos que seguir presentando frente a una realidad cada vez más neoliberal y orientada al mercado, y también cada vez más amenazada por la emergencia de populismos y fascismos. Neoliberalismo y fascismos tienen mucho en común, pues ambos producen desigualdades en las que, además, se refuerzan. Las resistencias feministas que se están dando hoy, principalmente en Latinoamérica, han sido un motivo importante para sentir que teoría y acción feministas han de ir de la mano para lograr grandes transformaciones sociales, culturales, educativas, políticas y económicas. Para un futuro feminista, de verdadera igualdad material, queda mucho, pero los movimientos alrededor del mundo por llegar a ese objetivo están haciendo luchas de gran envergadura, luchas que, sin duda, dan y seguirán dando sus frutos. Y, por ello, no podemos pararnos. Un hilo que ha recorrido gran parte de los debates del congreso ha sido la necesidad de entender los feminismos, en plural, en su tarea de incluirlas diversidades y superar un sujeto identitario de mujer que, por ser singular, ha dejado muchas veces situaciones y experiencias de mujeres “otras”, mujeres racializadas, empobrecidas, indígenas, no heteronormativas, trans, no binarias y muchas otras. Por eso, otra de las conclusiones es la necesidad de apostar por un feminismo (en el que caben muchos feminismos) que sea interseccional; es decir, que contemple, integre e incluya esas “otras” realidades. Todo ello nos exige una revolución epistémica, una transformación del conocimiento y de cómo entendemos la vida, las formas de apropiación de esta y de la vertebración de los poderes. Esa revolución ya ha empezado, pero hay que empujarla. En este congreso acabamos de hacer una pequeña aportación a esa revolución feminista. Pronto nos pondremos en contacto para ocuparnos de cuestiones de gestión de certificados y de publicación.¡Muchas gracias a todes por vuestro compromiso en el congreso, en los feminismos y en las vidas!Un abrazo,Sonia Reverter, directora del XXV Congreso IF